El padre de una niña que falleció en EE.UU. estrangulada por una pitón que tenían de mascota la madre y el novio de ésta, presentó una demanda contra el Departamento de Familias y Niños de Florida arguyendo que murió por negligencia, informó hoy un canal de televisión local.
Según el canal 6 de Orlando, que citó el documento del caso, Joseph Gilkerson interpuso la acción judicial a nombre de su hija, Shaiunna Hare, afirmando que esa agencia gubernamental falló en notificar a la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Vida Silvestre la presencia del reptil.
La menor falleció el 1 de julio de 2009 cuando la pitón birmana de 3,6 metros de largo se escapó de su tanque, que no estaba cerrado, y la estranguló cuando dormía en la casa donde residía en Bushnell, en la costa oeste de Florida.
El Departamento de Familias y Niños (DCF, por su sigla en inglés) recibió una queja en mayo de ese año de que Jaren Hare, madre de la menor, y su novio Charles Darnell, no estaban cuidando a Shaiunna de manera apropiada, informó hoy el canal 6 de Orlando.
Un investigador del DCF visitó la residencia y presuntamente vio a la pitón en el tanque, por lo que el padre de la niña sostiene que debió retirar a la menor de la casa, según el documento.
Gilkerson dijo que funcionarios de la Comisión para la Conservación de la Pesca y la Vida Silvestre no fueron contactados.
En julio la culebra se escapó del acuario, se deslizó dentro de la cuna de la niña y la estranguló, según investigadores.
Un informe de la policía señaló que Darnell había metido a la pitón en un saco para evitar que se escapara y la colocó en el interior del tanque que quedó abierto.
El hombre comenzó a apuñalar al reptil al día siguiente cuando lo encontró enroscado alrededor de la menor en la cama y logró separarlo de la niña.
Darnell llamó al servicio de emergencias, pero los médicos no pudieron salvar a la niña que mostraba señales de mordiscos.
Un juez de Orlando sentenció a 12 años de cárcel a Darnell y a Hare, tras ser declarados culpables de cargos de asesinato en tercer grado, homicidio sin premeditación y negligencia infantil.
Las pitones birmanas, reptiles no venenosos que pueden alcanzar más de seis metros de largo y son constrictores, se han transformado en una especie invasiva de los pantanos de los Everglades
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