jueves, 9 de febrero de 2017

ARTÍCULO DE OPINIÓN. JIMÉNEZ SÍ QUE ES UN MAYORDOMO. Saz Planelles


Que España es un país cainita lo sabemos todos. Criticamos y desprestigiamos siempre las iniciativas del adversario aunque éstas sean beneficiosas para la generalidad. Es lo que ha hecho Mario Jiménez, el portavoz de la Gestora del PSOE, al manifestar que “Rajoy se ha ofrecido a Trump como una suerte de mayordomo” y retrotraer a España a la “foto de las Azores”.

Si la frase de marras del mayordomo la hubiera dicho un político de derechas, se le habrían lanzado a la yugular todos los “tuiteros” y “facebookeros” al servicio de la izquierda diciendo que denigraba la profesión dignísima del mayordomo; las feministas talibanes dirían que el lenguaje era sexista, porque también hay mayordomas, y los políticos habrían pedido una comparecencia en el Senado o la dimisión del osado que dijo la frase metiéndose con los mayordomos.

Pero como ha sido un socialista quien la ha dicho, hay que reírle la gracia y sumarse al chascarrillo para sacarle jugo en las redes sociales y en los medios de comunicación que defienden la causa. Este menda, el tal Jiménez, no es más tonto porque no se entrena. No sé ustedes, pero yo estoy harto de los políticos que lanzan soflamas, proclamas y banderines lingüísticos de enganche para carnaza de los adeptos que los asumen a pies juntillas y se convierten en altavoces ideológicos.


A mí tampoco me cae bien Donald Trump. Pero reconozco que si España, o don Tancredo Rajoy, tiene la oportunidad de ofrecerse al presidente del Mundo como intermediario de algo, hay que valorarlo positivamente. Porque, no nos engañemos, Trump tiene mucho poder, y ya saben ustedes el refrán de que “a quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija”. Pero no piensan así los políticos que con tal de “ver al rival tuerto, son capaces de sacarse los dos ojos”.

Trump ha llamado a Rajoy en una llamada de cortesía siguiendo su programa de contactos con los líderes mundiales de países que tienen algo que rascar en el contexto internacional. Y España, mal que le pese al “tontoalastres” de Jiménez y otros políticos de la oposición, lo es. Es la cuarta potencia económica de la Unión Europea y disfruta de una posición geoestratégica privilegiada. Estamos cerca de los países árabes emisores de terrorismo y somos la querida y odiada Madre Patria de la mayoría de países que conforman América. Con los que además compartimos idioma. Todo esto es suficiente para que Rajoy se ofrezca a Trump como intermediario. Otra cosa es que el presidente del Mundo Mundial lo tome en serio o lo considere un mero gesto de cortesía.

A mí tampoco me cae bien Trump. Pero volviendo al sabio refranero español, “si no puedes con tu enemigo, únete a él”.
Saz Planelles



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