Intentaría darle otro tono, pero no lo puedo evitar. No se imaginan lo que me he divertido este fin de semana cada vez que me he imaginado las caras de alguno de los concejales de la historia de nuestro Benidorm de las dos últimas décadas, de cualquiera de los dos partidos que han gobernado la ciudad desde 1.993. Me sucedió esto una vez leí hace dos días que FCC, la empresa que ha hecho y desecho lo que le ha dado la gana en nuestra ciudad, decidía denunciar de nuevo al Ayuntamiento. Discúlpenme, pero estos ganapanes que se merecen eso y mucho más.
Lástima que sean los benidormenses con sus impuestos los que siempre pagan el pato de estos desmanes, y lástima también que nunca vayamos a tener un listado que de constancia, ni de los nombres de todos los que ayudaron para que esta empresa se beneficiara día tras día de cualquiera de los sistemas conocidos que permite la administración, ni de los pingües beneficios que muchos de ellos habrán obtenido en los últimos 20 años riéndoles las gracias, engordando cada día más al pavo y trasladando el muerto hacía delante. Y digo 20 porque aunque son 24 los que llevan cortando el bacalao en la ciudad de los rascacielos, es en estos últimos cuando han decidido sacar toda su artillería para demostrar que a ellos, ahora ya, no hay quien les tosa. ¿Y saben una cosa?, lo tenemos merecido.
Lo que ha significado FCC para la política practicada y llevada a cabo en las dos últimas décadas, no es más que un magnífico ejemplo de la desidia y la dejadez con la que se ha actuado en la administración municipal desde que el PP empezó a gobernarla, y el beneplácito con que el PSOE también lo consintió. FCC es una empresa, como cualquier otra, que ganó un concurso público en 1.993 y que venció en el 2.000. A partir de ese año se debería haber llevado a cabo otro Concurso Público que nunca se hizo. De aquellos fangos, estos lodos. Hoy recogemos la ira de una empresa que ya se cree dueña del corral. Es la vulgar copia de lo que le sucede a aquellos políticos que llevan tantos años en el machito que nunca saben en que momento lo tienen que abandonar, y cuando alguien les enseña la puerta de salida, se revuelven como enfurecidos diablos que ven perder su cortijo. Les recuerdo que en el salón de Plenos hay todavía algunos de aquella época en la que se adjudicó este concurso y han pasado 24 años.
Denuncié hace mucho tiempo y sigo manteniendo que esta empresa lleva 20 años cobrando de más a todos los benidormenses en los recibos de basura que gira cada mes. Dije y mantengo que la suma de todas esas cantidades cobradas de más, es superior a la deuda total que tiene hoy el ayuntamiento de Benidorm con todos los bancos juntos. Una auditoría de hace ya algunos años puso de manifiesto que nos engañaban con las horas trabajadas y los empleados con los que tenían que contar por contrato, como se engaña a aquellos que no vigilan, o bien porque no saben o bien porque no les interesa. A pesar de aquellos datos, nunca más se supo. Hemos tenido una subida del recibo de la basura superior al 200% en los años de gestión que llevan en la ciudad. Sin olvidar que seguimos teniendo una ciudad muy sucia con infinidad de carencias a pesar del potosí que nos cuestan cada año, en torno a 20 millones de euros, entre recogida de residuos sólidos y limpieza viaria.
Un trajín de personal digno de una sucursal de empleo, teniendo el galardón principal en cuanto a agencia de colocación de amigos y conocidos dependiendo quien gobierne, consiguiendo con esto que nunca nadie esté contento y el personal tenga todas las carencias del mundo en cuanto a conocimiento del trabajo y experiencia mínima a la hora de desarrollarlo.
Benidorm tiene lo que merece. 24 años con la misma empresa intentando asear la ciudad, recogiendo la basura y limpiando los edificios municipales, no puede ser nada bueno si nos atenemos a que los concursos públicos están para algo. Y ahora estamos recogiendo el fruto. Eso de la manida Transparencia algunos se lo han pasado por el forro en los últimos 17 años. Lo vimos también hace 9 meses en el cambalache que se montaron PP y PSOE para renovar por la cara la contrata del agua en vez de ir al correspondiente concurso público y convirtiéndolo en otro clamoroso espectáculo de pacto bajo el mantel. Tranquilos todos, tampoco pasó nada, todos seguimos pagando el recibo de agua que la empresa no renovada nos pasa cada mes por el banco.
Una empresa, FCC, que se ve fuerte por la cantidad de favores que otros les han ido pidiendo a lo largo de muchos años y ellos han cumplido a rajatabla, no está dispuesta ahora a que nadie le tosa. Se creen superiores, piensan que los que ahora les piden cuentas o no les dan concursos públicos, no están autorizados moralmente para eso. Ellos sabrán porque. Estoy seguro que todos agradeceríamos que nos lo contaran. ¿Por qué se limpiaban otras poblaciones de la comarca durante años con nuestros camiones?, ¿Por qué se ha dicho siempre que era una agencia de colocación de personal para satisfacción del político de turno?...
Hace unos años dos atrevidos concejales dijeron en rueda de prensa pública que nunca nos denunciarían por el incremento del IPC. Denuncia al canto y con solicitud de que les paguemos tres millones de euros en base a ese incremento no cobrado. Lo han ganado. El juez ha dicho que hay que pagarles casi dos. Todavía tuvimos que escuchar hace muy pocos meses a algún portavoz diciendo sentirse satisfecho porque en vez de 3 había que pagarles sólo 2. Alucinante.
Ya tenemos el siguiente bofetón en toda nuestra cara. Ahora dicen los señoritos de FCC que como ellos no han ganado el concurso público de limpieza de edificios, algo a lo que estaban acostumbrados desde tiempos inmemoriales, que van a denunciar al ayuntamiento. ¿Cómo habrá osado el Consistorio otorgar un concurso a otra empresa que no sea FCC?, ¡por dios!, ¿a quién se le ha podido ocurrir tamaña barbaridad?. Como estarán los mandamases de esta empresa en Benidorm sabiendo que se ha pedido ya la creación urgente de una comisión de trabajo para que se vayan redactando los pliegos de condiciones de lo que el año que viene, dios lo quiera aunque yo no me lo termine de creer, salgan a concurso público la limpieza viaria y la recogida de basuras. Han visto que han perdido los dos millones de euros anuales por limpiar los edificios públicos de Benidorm en favor de OHL, que lo ha ganado limpiamente, y han puesto la maquinaria en marcha para que ni de broma se les escape el pastel principal. La mejor estrategia pasa por empezar con amenazas de denuncia.
Ya saben como opino, ustedes me conocen. Siento una vergüenza interior que me produce hasta dolor cuando veo todo lo que pasa en el ámbito político de mi querido Benidorm. Me presenté a la alcaldía para intentar que toda esta basura, nunca mejor dicho, no siguiera campando a sus anchas por la casa de todos, pero el pueblo decidió, y aunque debería estar satisfecho del apoyo que obtuve, dos cosas fallaron clamorosamente. Los de siempre siguieron sacando más votos que nadie y yo me rodeé de calaña de características similares a lo ya conocido. Benidorm no tiene solución. Me atrevería a decir que incluso va a peor, con un alcalde que presenta tintes dictatoriales, al permitir que en el salón de plenos se multe a la gente por manifestarse libremente.
Por otro lado, el fin de semana ha dado para bastante más. Ayer pude disfrutar, no será la última vez, de la gastronomía de Casa Pinet y de nuevo firmé en su libro, esta vez con sabor especial, pues dejé escrito que sería la última vez que lo hacía en esa ubicación, a la espera de que muy pronto abra sus puertas en Alcalalí, el pueblecito que recogerá el testigo de aquello que cuatro políticos de Tárbena, que pasarán a la historia por su gran logro de conseguir cerrar Casa Pinet, no supieron cuidar. Veremos dentro de un año donde están todos los protagonistas de esta tremebunda historia. Yo me quedo con la ilusión de una familia que ya piensa mucho más en los próximos 44 años de historia que en los 44 que deja atrás. Ya no podremos decir aquello de que cuando vayas a Casa Pinet, no te olvides de visitar Tárbena.
Y recién estrenado el mes de abril muchas cuestiones nos asaltan. Da gusto ver como todos, trabajadores y empresarios, preparamos nuestra mejor cara para recibir la temporada que ya está aquí. Los parques temáticos de la ciudad, todos listos y preparados, con Terra Natura y Mundomar funcionando y Terra Mítica que abre sus puertas este próximo sábado, justo el día de antes del Domingo de Ramos, que da el pistoletazo de salida a una semana que para muchos será de descanso, para otros de vuelta al trabajo y para todos de Pasión y Turismo.
Esperemos que para entonces ya esté entre nosotros nuestro Willy Fox particular, Toni Pérez, que de repente se nos ha convertido en viajero empedernido, ayer en Londres y mañana en Colombia. Y es que cuando está uno a punto de cumplir los dos años de alcalde, superados ya los miedos de una Moción de Censura, con todo el parné negociado y bien atado, puede uno ya empezar a relajarse y disfrutar del cargo. Da igual si te terminan la Casa de Cultura, si te dicen que tienes que provisionar dos millones más de euros para pagar a unos vecinos a los que se tiene martirizados en la zona del Rincón de Loix desde hace 15 años, si nada se sabe de las obras del Pere María Orts i Bosch, si el Palau d´Esports se te cae a pedazos o si FCC te denuncia día sí y día también. Eso son ya minucias. El pueblo de Benidorm tiene la memoria minúscula y ya nadie le va a recordar al bueno de Toni que un mes antes de las elecciones, sólo hace dos años, aseguraba que nada más enfundarse el cargo de Alcalde, se cargaría tanto a la nueva empresa de la zona azul contra la que había votado en contra tres meses antes, así como a la actual empresa que gestiona el Low Festival, entre otras muchas cosas. De perdidos al río. Ahora ya controlamos los 3.000 votos de Ciudadanos por Benidorm a través de los dos concejales bien engrasados y no hay porque preocuparse de todas estas cosas que denuncia este periodista de pacotilla. Total, al pueblo le da igual, ¿verdad?.
Dos apuntes. Felicitar a José Ramón González de Zárate, Juan Francisco Pérez y Bernabé Cano, por sus nuevas responsabilidades dentro de la nueva Ejecutiva que se ha constituido este fin de semana en el Congreso Regional del PP, que ninguna sorpresa tuvo tal y como estaba previsto. Y decirles que me hizo mucha gracia el leer el sábado en la portada del diario Información que IKEA sí se va a terminar construyendo, pero no precisamente en Alicante capital, algo que ya les escribí el lunes pasado y leyó mi compañero Rodrigo Quesada en los micrófonos de Gestiona Radio. Ahora falta averiguar quién acierta con la nueva ubicación. Feliz semana.
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